Siguiendo una tendencia creciente en la emisión de bonos verdes por empresas brasileñas, FS Bioenergía da un importante paso al captar financiación con tasa de interés vinculada al desempeño socioambiental de sus operaciones. En total, son U$ 530 millones en emisión de Bonos Verdes. De acuerdo con el Framework aprobado, siguiendo los Principios de Green Bonds Initiative, los fondos recaudados con esta operación se destinarán a proyectos para ampliar la base forestal y los activos de producción de bioenergía. Los compromisos asumidos por FS Bionergia en la emisión de sus Bonos Verdes contribuyen directamente para las metas del Pacto PCI de Sorriso y, como consecuencia, para la Estrategia Estatal PCI.
La operación estuvo compuesta por la emisión de diferentes instrumentos, el primer paso fue la emisión de Certificados de Cuentas por Cobrar del Agronegocio (CRA), por un monto de R$ 210 millones, por parte de Credit Suisse, en febrero de este año. Después, en junio, FS emitió R$ 140 millones en Certificados de Cuentas Inmobiliarias por Cobrar (CRI), también por medio de Credit Suisse. Por último, un préstamo bilateral con Santander por un valor de R$ 180 millones. Estas dos últimas, tienen tasas de interés vinculadas al desempeño socioambiental, y se cubrirán hasta fin de año.
FS es una de las empresas signatarias del Pacto PCI de Sorriso e integra el grupo de fundadores del Instituto PCI, representada por la Unem (Unión Nacional de Etanol de Maíz). El director de Desarrollo Estratégico de la empresa, Eduardo Menezes Mota, presentó detalles sobre los compromisos de sostenibilidad en sus operaciones, inversiones y perspectivas de expansión a los miembros del Pacto Regional PCI de Sorriso, durante la reunión virtual realizada el 11 de diciembre.
“Nos sentimos próximos del PCI local y estatal, y queremos participar cada vez más en estas acciones y contribuir para el logro de los objetivos. Creemos que nuestro modelo de actuación ya contribuye para ello y nuestra planificación para 2021 es reforzar aún más esta participación”, informó Mota.
Durante la presentación, el director de FS destacó algunas medidas adoptadas por la empresa para garantizar la responsabilidad en la cadena productiva, como la compra de insumos de propiedades que actúen en conformidad con el Código Forestal. También informó que el maíz utilizado es de segundo cultivo, en rotación con el cultivo de la soja, no requiriendo la apertura de nuevas áreas de siembra y aprovechando los insumos, lo que la hace una actividad más sostenible.
En el ámbito del Pacto PCI de Sorriso, además de las inversiones en la base forestal y planta de etanol de maíz en la región, ya hay conversaciones previendo la posibilidad de alianzas en proyectos de soja certificada, con el CAT Sorriso, y para el aprovechamiento del DDG, uno de los residuos resultantes del procesamiento industrial, en la producción de ración animal. “Siempre buscamos tener una mirada y un cariño mayor hacia la comunidad en la que estamos insertados, además de apoyar proyectos alineados con nuestra visión de sostenibilidad institucional”, finalizó.