A finales de agosto, el Instituto PCI inició un proceso de evaluación participativa de la Estrategia PCI (Producir, Conservar e Incluir) cuyo objetivo es verificar en qué fase se encuentra el logro de las metas establecidas para cada uno de los ejes en 2015, año del lanzamiento de la propuesta en la Cumbre del Clima (COP21), realizada en París.
Para ello, se contrató una consultoría especializada para colaborar en la conducción del proceso involucrando a todos los miembros que participaron en la concepción, el desarrollo y la implementación de la Estrategia PCI en Mato Grosso.
El primer paso de este trabajo fue la realización de un webinar, el 27 de agosto, en el que se presentó la propuesta metodológica del proceso de evaluación.
La siguiente fase consiste en una encuesta online que se llevará a cabo de forma amplia con las instituciones participantes y aliadas, por medio de un formulario específico para cada eje de la estrategia y sus agendas temáticas, que permanecerá abierto hasta el 14 de septiembre. Las personas que participan en el proceso pueden responder todos los puntos del formulario de la encuesta o solo los relacionados a su área de trabajo (Producción, Conservación o Inclusión).
La tercera etapa del proceso de evaluación participativa será la celebración de talleres a distancia para cada eje de la estrategia, con un máximo de 25 participantes, que tendrán lugar entre septiembre y noviembre de 2020. Los resultados recolectados en la encuesta online servirán de base para las discusiones en los talleres.
“Estamos en el momento de analizar los avances y los desafíos en el logro de lo establecido inicialmente, evaluando cuáles deben ser las prioridades para los próximos años. Con ello, también elaboraremos propuestas sobre lo que hay que reajustar con relación a los objetivos e indicadores, manteniendo siempre la ambición de la PCI para Mato Grosso, de un desarrollo sustentable con base en el uso eficiente de la tierra”, explicó el director ejecutivo del Instituto PCI, Fernando Sampaio.
La Estrategia PCI es un abordaje jurisdiccional para el desarrollo sostenible en el estado de Mato Grosso, que reúne a los sectores públicos, privados y a la sociedad civil en torno a objetivos a largo plazo, acordados voluntariamente, en los ejes Producir, Conservar e Incluir. Entre los objetivos generales se encuentran: Aumentar la producción agropecuaria a través de la mejora de la productividad de la ganadería y la expansión del área de granos sobre las áreas ya abiertas; Eliminar la deforestación ilegal e implementar el Código Forestal; Crear mecanismos de compensación financiera para la deforestación legal; Apoyar la agricultura familiar y a las poblaciones tradicionales e indígenas en el acceso al crédito, la asistencia técnica, la regularización de tierras y la ambiental.
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IDH está invirtiendo 9 millones de euros en Mato Grosso en un período que va de 2016 a 2021, abarcando la Estrategia PCI, el Instituto PCI, el apoyo a la implementación de políticas públicas del Estado, los Pactos Regionales PCI y programas de campo, cofinanciados con el sector privado.